En el día de ayer nuestro psicólogo colegiado y ex-Decano del COP Melilla, Rodolfo Ramos, ha tenido la oportunidad de participar como ponente en el I Congreso Nacional de Avances en la Intervención Psicológica, organizado por la UOC y el Sistema de Emergencias Médicas (SEM), en la ciudad de Barcelona.
Ramos, ante un público numeroso, pudo explorar la integración de la Inteligencia Artificial (IA) en nuestro campo, la psicología.
A continuación, y extraído de su web personal, le facilito los temas que desarrolló:
Introducción a la Inteligencia Artificial
La IA se ha convertido en una herramienta esencial en muchos campos, incluyendo la psicología. Empecé definiendo algunos conceptos básicos: Big Data, algoritmos, redes neuronales artificiales (RNA), machine learning (ML) y deep learning (DL).
La IA se nutre de grandes volúmenes de datos, y su capacidad para procesar y analizar estos datos de manera efectiva la hace ideal para aplicaciones complejas.
Evaluación y Diagnóstico
Una de las áreas más prometedoras es la evaluación y diagnóstico mediante IA. A través del análisis de texto, voz y expresiones faciales, las herramientas de IA pueden detectar cambios en el estado emocional de los individuos. De forma potencial se pueden identificar signos de trastornos mentales. Por ejemplo, aplicaciones como Cogito Companion y Affectiva analizan el tono de voz. Otras como Amazon Recognition miden las microexpresiones faciales para evaluar el estado emocional, ofreciendo una nueva dimensión en la monitorización del bienestar psicológico.
Intervención y Prevención
Las aplicaciones de IA no se limitan a la evaluación; también tienen un gran potencial en la intervención y prevención. Herramientas como Woebot y Wysa utilizan principios de Terapia Cognitivo Conductual (TCC) para proporcionar apoyo emocional y guía terapéutica. Se adaptan a las necesidades individuales de los usuarios. Estos chatbots están disponibles 24/7, ofreciendo un apoyo continuo y accesible. Es lo que más valoran sus usuarios. Pero tiene muchas desventajas también. Están aún lejos de la capacidad de acercarse a la capacidad real de un terapeuta profesional con experiencia.
Además, la IA puede predecir comportamientos y riesgos futuros analizando grandes volúmenes de datos. Por ejemplo, se están desarrollando algoritmos que pueden predecir intentos de suicidio y episodios de ansiedad basándose en patrones de comportamiento digital y fisiológico. Esto permite intervenir antes de que los problemas se agraven, mejorando significativamente las estrategias de prevención.
Aplicaciones en Situaciones de Emergencia
En el contexto de emergencias y catástrofes, la IA puede optimizar la distribución de recursos y mejorar la respuesta en tiempo real. Herramientas como el Integrated Internal Displacement Population Sampler (IIDIPUS) utilizan datos de desplazamiento para predecir necesidades de recursos durante desastres naturales, mejorando la eficiencia y precisión en la gestión de crisis.
Formación y Capacitación
La IA también está revolucionando la formación de los profesionales de la psicología. Mediante simulaciones y plataformas de e-Learning basadas en IA, es posible crear experiencias de aprendizaje personalizadas y más efectivas, preparando mejor a los futuros psicólogos para manejar situaciones complejas y diversas.
Desafíos y Consideraciones Éticas
No obstante, la implementación de la IA en la psicología presenta desafíos significativos, especialmente en términos de ética y privacidad. Es crucial que las herramientas de IA sean transparentes, no discriminatorias y responsables. Además, la confidencialidad y la seguridad de los datos son aspectos fundamentales que deben ser rigurosamente protegidos.
Conclusión
La integración de la IA en la psicología ofrece oportunidades sin precedentes para mejorar la evaluación, intervención y prevención en el campo de la salud mental, especialmente en situaciones de crisis y emergencias. Aunque estamos en las primeras etapas de esta revolución, las aplicaciones actuales ya están mostrando un gran potencial. La clave será continuar desarrollando estas tecnologías de manera ética y responsable, asegurando que siempre beneficien a las personas que más lo necesitan.